Muchos creen que con ponerse delante de los
apuntes y memorizarlos basta para obtener una buena calificación pero aprender
lo que estas estudiando es algo más complejo.
En el éxito académico interfieren varios
factores entre los que destacan las aptitudes intelectuales, los conocimientos
previos, la motivación y las técnicas y hábitos de estudio.
En el presente artículo nos centraremos en
los dos últimos factores, donde un psicólogo puede ayudar, en mayor
medida, al alumno. Un psicólogo también puede mejorar las aptitudes
intelectuales de los niños a través de distintas actividades que ayuden al
desarrollo de estas aptitudes, pero en este caso no nos centraremos en este
factor.
La motivación es tanto o más importante que
la inteligencia que posea el alumno. Si miramos a nuestro alrededor podemos
observar como chicos inteligentes han llegado a abandonar la educación reglada
o como chicos considerados menos inteligentes han logrado obtener mejor
calificación que los primeros. En esta diferenciación entra en juego la
motivación de cada alumno. La motivación es considerada como una de las causas
principales del fracaso escolar que se puede observar en el desinterés por lo que rodea a la escuela, no realizar las tareas escolares hasta el último
momento o no llegar a hacerlas nunca, una escasa participación en las clases,
etc. Las causas de la escasa motivación pueden ser diversas, desde un
desinterés por parte de la familia en la formación académica de su hijo hasta la
existencia de otras actividades que tienen un mayor interés para el menor,
entre otras.
En consulta los psicólogos podemos hacer que
el niño, por si mismo, encuentre una motivación que le haga seguir con sus
estudios y realizarlos de manera óptima. Muchas veces los niños carecen de
motivación al no haberse preguntado por lo que pasará en un futuro o lo que
ellos quieren que pase. Por ello, el psicólogo mediante una serie de preguntas
hará que el menor se dé cuenta del motivo por el cual para él es importante
obtener unas buenas notas ahora.
No es novedad que ocurra que un chico
invierte muchas horas de estudio y no obtiene la calificación esperada o que le
cueste demasiadas horas entender el contenido de un examen. Todo esto puede
deberse a que no utiliza unas técnicas de estudio adecuadas o que carece de
hábitos de estudio. Para mejorar el rendimiento académico no solo basta con
conocer las diversas técnicas que existe si no es fundamental utilizarlas y
adecuarlas nuestras características.
Las técnicas de estudio no sirven únicamente
a aquellos chicos que obtienen malas calificaciones académicas sino también
para aquellos con unas calificaciones aptas pero quieren mejorar su
rendimiento y la eficacia de su estudio. Para ambos casos las técnicas de
estudio son muy provechosas. Las técnicas de estudio son muy importantes en
todo el proceso académico no solo para educación primaria y secundaria sino
también para estudios universitarios. Por ello,
para una persona que a día de hoy ve innecesarias estas técnicas puede
verse en la tesitura de que en un futuro se encuentre con dificultades en su
estudio las cuales podrían ser solventadas teniendo un conocimiento sobre
técnicas de estudio y así poder responder a los contratiempos que le puedan
surgir como puede ser el aumento de materia en un examen o un examen con
multitud de datos que aprender.
En consulta también podemos enseñar a los
chicos a tener unos hábitos de estudios adecuados a su edad y curso académico.
Les enseñamos diferentes técnicas de estudio e intentamos adecuarlas a las
características que el menor tenga más desarrolladas por ejemplo no es lo mismo
alguien que sea muy visual que un menor que tenga una alta capacidad de
memorizar, el modo de utilizar las técnicas será parcialmente diferente en cada
caso.
Es importante quitarse el tópico de que los
psicólogos únicamente tratan enfermedades mentales, ya que como vemos en este artículo pueden ser de gran ayuda en otros campos de la vida como el académico.